La desigualdad de género es una realidad en el mundo que vivimos, prueba de ello es la existencia del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 5 de igualdad de género y empoderamiento de la mujer. Los ODS o la agenda 2030 de las Naciones Unidas es la principal hoja de ruta estratégica para los países, entidades y organizaciones y establece que la igualdad de género es un derecho humano fundamental, dado que la mitad de la población mundial son mujeres y niñas. Las empresas llevan trabajando años para implantar medidas de igualdad laboral, en parte por el auge de las regulaciones internacionales, europeas, nacionales y autonómicas y, recientemente, se acaba de publicar el primer estándar internacional ISO sobre la igualdad de género y empoderamiento de las mujeres, la ISO 53800, que ayudará a seguir impulsando la igualdad de género en el entorno laboral.
Qué son los estándares internacionales y las normas ISO
Los estándares internacionales son documentos que establecen requisitos mínimos que deben cumplir los productos, procesos, servicios, sistemas o empresas para garantizar una cuestión a estudiar (calidad, seguridad, igualdad…). Estos estándares los elaboran organizaciones reconocidas, como la ISO (Organización Internacional de Normalización).
Las normas ISO son un conjunto de estándares o normas internacionales que se crearon para ayudar a las empresas a establecer unos niveles de homogeneidad en relación con la gestión, prestación de servicios y desarrollo de productos en la industria. Estas normas establecen requisitos, directrices, y especificaciones para garantizar la calidad, seguridad y eficiencia de productos, servicios y sistemas, las desarrollan comités técnicos, integrados por personas expertas de diferentes países. Las áreas en las que se aplican son muy amplias: gestión de la calidad, medio ambiente, seguridad de la información y tecnología… En mayo de 2024 se publicó la ISO 53800 de igualdad de género que está disponible, de momento, solo en su versión en inglés.
¿Qué es la ISO 53800?
Según el organismo normalizador, la ISO 53800 “proporciona directrices para que las organizaciones promuevan e implanten la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres. Se focaliza en superar la desigualdad que deriva de los roles específicos de género y es aplicable a todas las organizaciones, con independencia de su tamaño, ubicación o ámbito de actividad”. Esta norma se acaba de publicar, tras pasar por los estados del ciclo de vida de preliminar, propuesta, preparación, comité, consulta y aprobación.
Todas las organizaciones públicas y privadas pueden utilizar la ISO 53800: empresas, ya sean pymes o grandes, organismos gubernamentales a nivel nacional, regional o local, así como cualquier otro tipo de organización. Independientemente de la madurez de la organización en materia de género, la norma promueve la transformación cultural global hacia la igualdad de género.
La implantación de esta norma en las entidades conlleva una serie de beneficios como promover la comprensión global y la implantación de la igualdad de género, también en el ámbito de las empresas; respaldar la creación de culturas inclusivas y equitativas en las organizaciones; fomentar la igualdad de género como un elemento fundamental dentro de la defensa de los derechos humanos y ayudar a las organizaciones a cumplir con sus obligaciones legales en materia de igualdad de género. La existencia de esta norma ISO es oportuna para promover un marco estandarizado entre organizaciones a nivel internacional y que se promueva un lenguaje común. Además, por la naturaleza de estas normas se busca un enfoque de mejora continua, teniendo que plantearse trabajar cada año en cuestiones relativas a la igualdad laboral.
Más información de la ISO 53800
Esta ISO está liderada por la Asociación Francesa de Normalización (AFNOR) y la ha desarrollado un grupo internacional de más de 50 personas expertas de diferentes grupos de interés que trabajan en el comité de proyecto ISO/PC 337, Directrices para la promoción e implantación de la igualdad de género. Según la UNE La revista de la normalización española el proyecto cuenta con una terminología base de términos y definiciones de organismos internacionales y establece cuatro prioridades estratégicas (dimensión interna, actividades e inversiones, relaciones externas y comunicación interna y externa), que han de ser abordadas tras un análisis interno y externo de la organización, la identificación de los grupos de interés y seleccionar las cuestiones relevantes en cuanto a la igualdad de género. Las prioridades estratégicas se han de abordar teniendo en cuenta las temáticas descritas a continuación:
- La educación y el acceso a la formación.
- La salud sexual y reproductiva y los derechos asociados.
- La prevención y extinción de la violencia contra mujeres y niñas.
- Los derechos de las mujeres y niñas previniendo y combatiendo toda forma de discriminación.
- El empoderamiento económico de las mujeres y su participación en la vida pública.
Para identificar el cumplimiento de la norma no se establecen requisitos mínimos, dado que no todas las entidades a nivel global parten del mismo punto de partida. Este enfoque de la norma ISO consigue que cada entidad se esfuerce por mejorar y alcanzar la igualdad de género dentro de sus contextos.
La realidad a nivel global es que todavía se necesita un gran impulso de la igualdad de género y del empoderamiento de la mujer en todos los ámbitos de la sociedad, también dentro del ámbito empresarial. La creación de un estándar internacional, como es la ISO 53800, es una gran noticia para seguir trabajando en la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, pero hasta su publicación definitiva quedan todavía dudas en cuanto a cómo se tendrá que aplicar.