Comenzamos un nuevo año y desde la Dirección Xeral de Relacións Laborais de la Xunta de Galicia queremos compartir con todas las personas que leen nuestro blog, que nuestro principal deseo para este año que comienza es lograr el progreso de la igualdad de género, principalmente vinculada al área laboral. Y eso, ¿qué quiere decir? Te lo explicamos más detenidamente a lo largo de este texto.
Más mujeres liderando empresas
Según el informe Women in Business 2021,elaborado por Grant Thornton que analiza a empresas de 50 a 500 empleados, cotizadas y no cotizadas, la cifra de mujeres directivas en España se sitúa en el 34% por segundo año consecutivo. Así pues, son muchos los obstáculos a vencer para lograr el liderazgo y la participación de las mujeres en la toma de decisiones sobre estrategia empresarial. Esta realidad contrasta con su indudable capacidad como líderes y agentes de cambio.
Este documento también habla de que los cambios en las tendencias laborales derivadas de la pandemia es probable que tengan un efecto positivo en el futuro de las mujeres líderes. Pero para lograrlo se alude a la necesidad de considerar todo lo que se hace para fomentar la diversidad y la inclusión no como una moda o un proyecto ad hoc destinado a cumplir el expediente, sino de un compromiso real con el cambio a largo plazo. Esto indica que todo lo que se haga a lo largo de 2022 es posible que no tenga un impacto notable hasta dentro de cinco años. No es posible cambiar estructuras organizativas complejas en las empresas de la noche a la mañana, pero el compromiso de la cúpula directiva es vital para conseguir este objetivo.
Más empoderamiento económico
El poder y la independencia económica de las mujeres contribuye directamente a la igualdad de género, la erradicación de la pobreza y el crecimiento económico inclusivo. Las mujeres contribuyen de manera muy significativa a las economías, ya sea en empresas, en las granjas, como emprendedoras o empleadas o trabajando como cuidadoras domésticas no remuneradas.
En 2020, en toda España, la población activa era de 23 millones de personas (datos de la Encuesta de Población Activa que elabora el Instituto Nacional de Estadística). De todas ellas, alrededor de 19 millones tenían empleo y más de 8,7 millones eran mujeres. Traduciendo estos valores a porcentajes, la participación femenina en el mercado laboral es de casi el 46% en 2020.
Estos valores nos pueden hacer pensar que la posición de la mujer es igualitaria a la del hombre en el mercado laboral. Nada más lejos de la realidad. Analizando más valores que nos ofrece el INE en su estudio Mujeres y Hombres en España, con datos más actuales de 2018, el salario anual más frecuente en las mujeres (15.484,4 euros) representó el 83,8% del salario más frecuente en los hombres (18.470,8 euros).
Aquí tenemos una ecuación muy compleja en donde entran en juego como variables no sólo el salario percibido, sino el tipo de contrato, el tipo de jornada, las reducciones por conciliación… Para ello, los planes de igualdad en las empresas, el registro y la auditoría salarial son herramientas que despegarán en 2022 y ayudarán a crear condiciones laborales más igualitarias.
Poner fin a la violencia contra las mujeres
La violencia contra mujeres y niñas es una violación grave de los derechos humanos. Su impacto puede ser inmediato como de largo alcance, e incluye múltiples consecuencias físicas, sexuales, psicológicas, e incluso mortales, para mujeres y niñas.
En el ámbito laboral también tiene lugar la violencia contra las mujeres en forma de acoso sexual y por razón de sexo. Así lo recoge el Convenio de Estambul, al que España está adherida. Sería deseable que se realizase una revisión de la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género para incluir el acoso sexual o por razón de sexo como una de las formas más habituales de violencia contra las mujeres.
Aquí, en Galicia, contamos con la Ley 11/2007, de 27 de julio, gallega para la prevención y el tratamiento integral de la violencia de género, que ya incluye en el artículo 3, formas de violencia de género, el acoso sexual en el trabajo como violencia contra la mujer.
Más juventud, más mujeres con discapacidad
Otro de nuestros deseos es ver a más mujeres jóvenes y más mujeres con discapacidad trabajando día a día en las entidades gallegas. La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible cuenta con el ODS 10 de Reducción de las desigualdades e impulsa el logro de beneficios igualitarios para la juventud y las personas con discapacidad.
Estos son parte de nuestros deseos de progreso para las mujeres en 2022. Esperamos que compartas con nosotros esta visión y nos ayudes a contribuir formando parte de las actividades que tenemos previstas desarrollar desde la Consellería de Emprego e Igualdade o impulsando la igualdad en tu organización.
